UNIVERSIDAD DE LOBOLANDIA Y LAS BIZARRAS AVENTURAS DE LA LOBITA

Luego de mi lacrimógena entrada anterior, hoy vengo con cosas más alegres para entretenerlos, informarlos y permitir que se burlen a gusto con mis desgracias, porque son muchas.  Eh, pues estaba yo diciendo que hoy ustedes, sí, USTEDES, serán parte de un tour especial por la (tatatataaaaan) UNIVERSIDAAAAAAD DE LOBOLANDIAAAAA!!!
(Ahora, como diría cierto dinosaurio homosexual que sufre de retraso mental: usen su imaginación y piensen en mí vestida con uno de esos ridículos trajes sastres que usan las aeromozas).
Como les decía, la Universidad de Lobolandia es de las universidades con mayor excelencia académica en todo este lado del mundo (olvidándonos de tonteras anglosajonas como Jarvar, Lleil y Laquesejunteestasemana), aunque sus instalaciones internas son... bueno, algo variables. Tenemos en promedio 8 entradas (una de ellas clausurada para permitir sólo el acceso de automóviles de los directivos), aunque hay una leyenda urbana que habla sobre una novena puerta que sólo los masones conocen.. o bueno, algo así decía la leyenda.
Adentro, hay como 6 edificios gigantes y un piso inferior donde están las salitas de reunión chiquititas, algunas aulas interactivas y claro, la cafetería. Oh sí, TENEMOS CAFETERÍA, y adivinen qué, SIRVEN COMIDA DE VERDAD, no como en la cooperativa (no muy cooperativa que digamos) de mi ex campo de concentración. Entre los 6 edificios, dos de ellos son mega auditorios, y un tercero es el lugar preferido de su segura servidora, osease...
NUNCAMÁS: ¿Los baños?
Claro que no, imbécil, aunque los baños aquí oscilan entre los baños semidecentes y los que están para llorar... o para una película porno del tipo barato-tercermundista-no tuve dinero para comprarme una cámara mejor así que la grabé con un celular y la edité en WMM. Eso sí, NINGÚN baño aquí tiene papel higiénico :/
El lugar preferido de la Lobita, como iba diciendo, es la biblioteca, ¡¡y apa biblioteca!! tiene de todo: computadoras, escritorios personalizados para la privacidad, mesas para estudios en grupo, sillones para lecturas de pasatiempo, y un sistema de organización que DE VERAS FUNCIONA. (Ooooh yeaaah).
El resto de los edificios es una mezcla de oficinas y salones, a veces revueltos unos con otros, y por último tenemos dos librerías en que, además, venden FRAPUCCINOS!!! (pausa para decir: hmmmmm frapuccino, aaaaaaaaaaaaagh...).
Y a grandes rasgos, esa es la Universidad de Lobolandia, a la cual yo asisto 4 días a la semana en condiciones que algunos consideraríamos inhumanas si no supiera por boca de una que estudia ingeniería industrial que ellos sufren más que nosotros.
Y hoy, en nuestro Rincón de los Sinsabores (no mientan, extrañaban que les platicara mis fatídicas salidas de casa) les contaré cómo yo, Lil' Beyoncé, Chity y MMM (le decimos MMM porque le decimos por tres nombres diferentes... O.o lo sé, qué loco) nos fugamos de las presiones diarias y huyendo como cobardes nos refugiamos en el Parque Natural de nuestra ciudad.
Ahí, mientras todos gozábamos de la soledad y la naturaleza, se nos hizo muy fácil aventarnos una carrera en columpios y... lanzar nuestros tenis al aire... y, tras los tenis, a nosotros mismos. MMM fue el único que cayó en pie y haciendose el rock star, pero Chity no se atrevió, Lil' Beyoncé aterrizó como fardo y yo... yo... bueno, lo importante es que del suelo no pasé. Después nos subimos a los subeybajas donde por diferencia de peso simplemente no pudimos hacer ninguno de nosotros un equilibrio decente, y más tarde, nos subimos a un raro juego que básicamente tiene forma de esfera y cuando te subes a él debes darle vueltas con una palanca y sales mareadísim@ de la experiencia.
Por fin nos cansamos y cuando daban las 2, dijimos que era hora de irnos... pero ¿a dónde? He aquí las sugerencias:
LIL' BEYONCÉ: ¡Vamos a comer! Muero por unas papas con chorizo.
CHITY: No, vamos al cine.
MMM: ¬¬ ...y si vamos a mi casa?? (en tono poco convincente)
LOBITA: Aaaaash yo quiero irme de paseo, vamos a la Plaza, ¿no?
Como no logramos ponernos de acuerdo, terminamos yendo a la casa de Chity a comer quesadilas (y papas con chorizo como desagravio) y ver una película. Luego de eso volví con el estómago a reventar, cansada, golpeada y asoleada, pero por fin libre del estrés de semanas de exámenes.
Así que... se acerca Halloween (uuuuuuuuh) y tengo una malvada sorpresita preparada para ustedes. Díganme... se atreven a descubrirla??? Adiosito!!!