FAVOR DE ALIMENTAR A HOLMES Y A HELSING, GRACIAS.



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lunes, 4 de abril de 2011

Gente, soocito permiso para decir... FELUZ CUMPLEAÑOS TONY STARK!! (ah, no, perdón, Robert Downey Jr)



Llámenme loca (esperen, ya lo hacen...) o maniática (normalmente le digo así a la profa de Arte... hoy me comprobó que lo es) o sociópata parafílica con tendencias jonáticas (hmm... eso es nuevo) pero la realidad es que hoy, una vez más, cumple años el lobo yankee del que se enamoró su siempre querida Lobita ^^

Como en el primer cumpleaños de Robert Downey Jr les conté sus tristes pormenores biográficos y les conté sobre algunas de sus pelis, hoy vengo a ofrecerles un delicioso y exclusivo contenido de fotos y anécdotas que no verán en ninguna parte del mundo que no sea Internet. Pero primero pasemos a la línea de tiempo, ¿sale?

El 4 de abril de 1965 exactamente a las 13:10 horas (no me pregunten dónde conseguí esa info, porque no me acuerdo) nació un minúsculo, escuálido y patético pecesito newyorkino llamado Robert John. El pecesito era, sencillamente, adorable de pequeño, ¡en serio! verlo de chiquitín te provoca besarlo y arrullarlo largas horas cantándole esa inolvidable melodía de "te quiero yo, y tú a mí..."

¿Ven? ¿No es tierno?

Nuncamás: Increíble que algo tan pequeño y esponjoso pueda convertirse en la aberración que es hoy...

Cállate, pájaro envidioso ¬¬

Bueno, el pequeño y abrazable Robertito creció y creció hasta convertirse en... esto:

Oh lala, la dulce perdición momentánea del sentido común y el llamado biológico de toda mujer inteligente a reproducirse... eh... hmm... pensé en voz alta de nuevo, ¿verdad? (insterte aquí asentimientos con la cabeza en masa).

Pero bueno, ahora que la breve línea del tiempo ha finalizado sólo puedo presentarles mi especial súper especial de...

LAS CRÓNICAS DE LOBITA: EL CINE, LA TELE Y LAS REVISTAS.

Porque como ya dije antes, ser fan es trabajo de tiempo completo y con poca remuneración (primera vez que el comunismo suena a paraíso, ¿no?), por lo que son necesarios corazones valientes, estómagos resistentes y mente abierta para hacerlo todo bien. Y Lobita tiene muchas anécdotas sobre ser fan que... bueno... Helas aquí:

NUMERO UNO: EL DETECTIVE CONTRA LOS MAMÍFEROS.

La primera vez que le presté atención a Downey sin intenciones homicidas en mente fue a mediados del 2009 y, posteriormente luego de un período refractario (los hombres saben muy bien a qué me refiero) a principios del 2010. Cuando vi el trailer de Sherlock Holmes me llamó mucho la atención, porque nunca había leído algo de él, y no por disgusto sino porque mi gente se amarró el codo y no me compró nada de él. Después, sin embargo, llegó un miércoles de dos por naco... ¡perdón! de dos por uno en el cine y fui con Mamá Loba y Loneznito, porque mi odioso hermano quería ver Alvin y las Ardillas 2. De pronto, mis ojos en forma de ¬¬ se toparon con el póster tamaño pizza macro de Sherlock, donde Downey se lucía tal y como lo que siempre ha sido. un gato orgulloso de sedoso pelaje encaramado en un pedestal de oro, admirándose a sí mismo y dejando que otros le admiren. El flechazo fue lento... como de 3 minutos más o menos... pero al final salí corriendo a la taquilla, donde mi familia seguía formada, y grité:

LOBITA: ¡Mamá, mamá! ¿Me dejas entrar a ver la de Sherlock? Por favoooooooooooor...

MAMÁ LOBA: No, si no quieres ver Alvin y las Ardillas te largas a la casa.

Ni modo, me tuve que chutar "Single Ladies" versión ardilla mientras alguien más gozaba de la siempre hilarante escena de Holmes esposado a la cama sin prenda alguna más que un triste almohadón.

NUMERO 2: PROBLEMAS FISIOLÓGICOS... HMM...

La adolescencia es una etapa biológica bastante rara, donde todo en el cuerpo despierta, y cuando digo todo, digo TODO, hasta lugares del cuerpecito que desearíamos que nunca despertaran (va de nuevo: los hombres me entenderán). Y eso era justamente lo que ocurrió conmigo, pues entrados apenas los 17, la imagen idílica de una Lobita civilizada que sólo sabía de sexualidad por libros y laaaaaaaargas y deprimentes pláticas escolares descubrió que la enciclopedia esa ilustrada tenía razón: "la sexualidad es una cosa que se da a diario". Amén, bro.

Resulta que, por cuestiones meramente fisiológicas (dominadas por un cerebro "normal") tenía extraños ataques cada vez que el susodicho aparecía en la tele, en un afiche, una revista, un loquesea, ataques más o menos con estos síntomas:

-Respiración superficial como si hubiera corrido.

-Color rojo tomate desde la frente hasta el pecho.

-Temblor de rodillas.

-Efecto invernadero interno, llámese tambien "¿soy yo o hace calor aquí?"

-Serie de ruidos raros e involuntarios, tales como grito-jonático, suspiros de telenovela y sí, sonidos aún más terroríficos.

Luego de un rato uno se acostumbra y aprende a manejarlo, que si no...

NUMERO TRES: PORQUE CUANDO SE VIENE SE VIENE...

Por mi jacal vendían películas (ahora no, obvio), y una vez al mes corría al emporio de videos a preguntar por alguna peliculita de Robert. Tanta así fue mi insistencia que la última vez que fui, apenas estaba dando el título de la peli cuando el vendedor me interrumpió y dijo: "Es con Robert Downey Jr, ¿no?" y con eso bastaba. Jaque Mate.

NUMERO CUATRO: LOS PORMENORES DE VIVIR EN UN MUNDO LLENO DE JUSTIN BIEBER Y SAGA CREPÚSCULO.

Las premiaciones televisivas donde Robert era nominado eran tortura para mí, pero ya saben, el ser humano es masoquista por naturaleza, y aunque sabía que el resultado jamás sería favorable para Robert yo votaba como loca diariamente para los MTV MA, los KCA, los TCA... bueno, los premios que fueran necesarios para que él ganara. Pero noooooooooo, los premios más vendidos que nada ¬¬ Crepúsculo y su Bobo Pattinson lo noquearon a lo largo del verano, y Beyoncé le ganó a Mejor Pelea (O.o sí... es lo mismo que yo pensé...) por una película que, por lo visto, NADIE vio. No es todo: últimamente la revista de Por Ti saca LA MISMA PORTADA todas las quincenas, una portada chafísima con las caras de Joe-Nick Jonas, Justin Bieber, Robert Pattinson y Taylor Lautner. Irónicamente, hay revistas como la de Vogue en español donde pude contemplar al Iron Man favorito de todos en versión elegance, pero comprarla sale en un ojo de la cara. Diablos...

NUMERO CINCO: NO ERES EL ÚNICO... ¿EH?

Hay cientos de miles de Downey Girls en el mundo, pero nunca contamos a un grupito especial de fans cuya peligrosidad es menor, pero eso no le quita fuerza: los fans hombres. Como si ya viniera en su chip mental, todos los hombres que conozco que son fans de RDJ tienen un comportamiento muy pero muy extraño... bastante cercano al de una belieber pero con un índice de inteligencia cuyo IQ se mide en 150 o 160 cuando mínimo. Estos fans son arrebatados con lo que tienen, y miran a las Downey Girls como simples adolescentes con hormona alborotada. Esto fue lo que me ocurrió, pues una amiga me dijo que tenía no una, ni dos, sino tres revistas que estaban dedicadas EXCLUSIVAMENTE a Robert, y pensaba regalarme una. Bueno... las revistas volaron, y al parecer el cupable fue un chico que era fan incondicional desde hace muchos ayeres. Lo único que pude decir fue...

¿Y LE CUESTA TANTO MUGRE TRABAJO SOLTAR UNA DE LAS **** REVISTAS? Yo creo que sí :(

En fin, que mi historia no como Lobita, sino como fan de Robert Downey Jr es una de esas historia trágicas, cómicas y llenas de aventuras que recordaré cuando sea adulta, como una de ésas experiencias poco comunes que te divierten y que, sin querer, pueden ayudarte a elegir el rumbo de tu vida.

¡Adiosito!

sábado, 5 de marzo de 2011

CUMPLEAÑOS FELIZ, CUMPLEAÑOS FELIZ... ¡SI TU COMO NO!

Llevo exactamente 17 años y dentro de 5 días tendré 18 velitas apagadas (mejor dicho, 18 velitas encendidas, los optimistas procuramos ver el vaso medio lleno a verlo medio vacío). Durante esos 17 "sapos verdes" me ha pasado de todo un poco, desde cosas tiernas, hasta divertidas y hasta ésas cosas que te hacen decir: ¿PORQUÉ DEMONIOS NO ME METO UN BALAZO Y YA?
He aquí una línea de tiempo de Lobita y 17 cumpleaños:
1° año: me pusieron un vestido de muñequita de porcelana y yo sola me estampé contra el pastel. Jamás entendimos porqué hice eso.
2° y 3° año: como no hay fotos y nadie recuerda bien lo que sucedió, me los perdí (el colmo de la ironía).
4° año: Mi tío contrabandista me regaló una lonchera de Batman, importada (creo... tengo mis dudas luego de que en un periódico saliera la foto de una lonchera igual con el título de PERDIDA) y recibí un vestido un poco raro, todo tejido en pelo de ángel (oh, sí).
5° año: Fiesta en mi kinder. Me hicieron un pastel con un dibujo de una casita, y yo me comí todos los ladrillos y las rosas de azúcar. Eran los buenos tiempos en que lo único preocupante en mi casa es que yo estaba creciendo.
6° año: Otra fiesta, pastelito decorado con un dibujo medio abstracto (nunca supe si era un retrato hecho con chantilly de alguna obra de Dalí o Picasso) y usé un vestido azul.
7° año: Mi tía me llevó a la Plaza Magna de mi ciudad (la cual recuerdo más grande, pero en fin...) y de regreso, un pastel de chocolate me esperaba.
8° año: Otra vez a una plaza, esta vez, una que está ubicada a pocas cuadras de un jardín público donde hay un busto de Beethoven (sí, de Beethoven) mirando ariscamente a los transeúntes. De regreso descubro que me regalaron una computadora de juguete que se puede conectar a la T.V.
9° año: Una vez más, a una plaza más pequeña donde me gasté más o menos 200 pesos jugando a un juego electrónico de carreras con dinosaurios donde yo gritaba "¡Rápido rápido rápido rápido... saaaaaaaaaaaalto... rápido rápido rápido rápido... saaaaaaalto.... rápido rápido rápido... METAAAAAA!" (si bien que me acuerdo).
10° año: Un pastel coronado con la macabra figura de un payaso y con sabor a pastel de hace 40 años (rancioooooooooooo). Definitivamente no fue el mejor, pero tampoco el peor, ése estaba por venir...
11° año: Me regalaron mi primer celular, cuya función era única y exclusivamente hablar por teléfono. Sin juegos, sin cámara, sin... nada.
12° año: Se amarraron el codo y me regalaron un vestido O_o Hello, desde los 7 años dejé de usar vestidos, y más aún ¡si eran floreados!
13° año: El peor. Nadie recordó mi cumpleaños ni en mi casa ni en mi escuela, mucho menos en mi escuela donde yo era la loca que se vestía de negro y leía poemas en los recesos. Llegando a mi casa lo único que vi fue lo de diario: caos. ¬¬
14° año: Un poco mejor, al menos me felicitaron. Pero aún así... estuvo X.
15° año: Mamá Loba me convenció de hacer una fiesta por mis quince (lo más nefasto entre lo nefasto) y ahi voy de idiota a complacerla y estuvo casi a la par de mi cumpleaños 13. Chéquense: de las 9 amistades que invité, dos faltaron (las más importantes), y de los que sí fueron, llegaron tarde y solamente 2 se dignaron a traer regalo, las demás llegaron yo creo que por deber social (mejor ni hubieran venido >.<) y para zamparse la pizza. ¡Aaaagh, mueran!
16° año: Bizarro. Me regalaron unos bonitos calcetines de suave algodón con el dibujo de huellas de perro, maquillaje y... ¡ah sí! me preguntaron que si estaba enferma porque me veía muy delgada. ¬¬
17° año: Me regalaron, más que nada mis amigas, objetos representativos, sin gastar mucho dinero. En mi casa, un hermoso pastel de chocolate me esperaba pacientemente... y Lobeznito intentó comérselo y de paso ofrecerle de MI pastel a SUS amiguitos. Mamá Loba salió en mi defensa y por poco lo descuartizan, muajajajajajaja.
Y en otras noticias, ¿se han preguntado... cómo la han pasado en sus cumpleaños ésas celebridades que han marcado tanto a Lobita? Averiguémoslo.
Cumpleaños de Van Gogh.
Una locura; sus mejores amigos se cooperaron y le compraron un pastel por pedido, el cual pidieron específicamente que llevara el dibujo de "la noche estrellada". Cuando la party se estaba poniendo mejor y abrieron la caja del pastel, descubrieron que éste tenía forma de oreja (uuups). Van Gogh no se descorazonó y, para demostrarles lo lindo que éra comer pastel de oreja, tomó el cuchillo y la cortó... pero no el pastel con forma de oreja, sino... su oreja.
Cumpleaños de Beethoven.
Tener cambios de humor cada 20 minutos podría parecer malo, pero no para él. Se la debió pasar muy a gusto en completa soledad, acompañado de algún canario y tocando en el piano la canción de Happy Birthday para sí mismo. Luego se fue a comer pastel y se la pasó el resto del día escribiendo insultos para sus detractores. Bellísimo.
Cumpleaños de Allan Poe.
Lo peor que te puede pasar en tu cumpleaños es que estás en la fiesta y aparece tu albacea y enemigo natural (Rufus Griswoold) acompañado del trío de arpías que duraron unos tres meses haciéndote la vida imposible (Elizabeth Ellet, la facilota en turno, y sus dos amigas, Margaret Fuller y Anne Lynch Botta), junto a tu ex mejor amiga Frances Osgood, tu amor platónico Sarah Withman, y el amor de toda tu vida, Elmira Royster, TODOS en una habitación pequeña totalmente descontrolados, y lo peor: hay licor, muuuuuuuuuuucho licor. Ovbiamente al ver la "amiga fiel" dijo: "de aquí soy" y le dio duro hasta que terminó arriba de una mesa cantando y luego cayó desmayado y despertó dos días más tarde en un lugar muy extraño...
Cumpleaños de Downey Jr.
Según mis cálculos, uno de sus cumpleaños se lo pasó tras las rejas. ¿Su regalo? Una barra de jabón. Mejor no ahondemos más en eso :S
Así que... ¿qué opinan de los cumpleaños de Lobita? ¿Creen que a los 18 me pasen cosas mejores o peores? ¿Cuál cumpleaños famoso fue el mejor? ¿Me regalarían algo ustedes? ¿Creen que mi gatita deje de lamerme la cara cuando estoy dormida? Adiosito!!!